Frigerio: “Recibimos una provincia desfinanciada, endeudada y sin recursos”
Con un discurso centrado en la situación provincial recibida, los proyectos de leyes que enviará a la Legislatura, y donde dejó también un mensaje al gobierno nacional sobre los recursos a las provincias, el gobernador Rogelio Frigerio pronunció este jueves su primer mensaje ante la Asamblea Legislativa en el Centro Provincial de Convenciones de Paraná, y dejó inaugurado el 145º período de sesiones ordinarias.
“Ante todo quiero decirles gracias a todos los entrerrianos que me hayan confiado la responsabilidad de ser el gobernador de nuestra provincia, es el honor más grande que pudieran haberme dado. Como dije el día que asumí, lo más importante para mí y para este equipo que me acompaña es volver a poner a nuestra provincia en el lugar que se merece y que todos podamos vivir mejor”, introdujo en su mensaje. Y agregó: “Sé que después de tantas décadas en la que sentimos que el esfuerzo no sirvió para tener la vida que queremos este objetivo que nos planteamos puede sonar lejano o una simple expresión de deseo. Estamos viviendo un momento crítico, no tengo que contárselos, a un escenario nacional devastador producto de años de políticas populistas se suma un contexto provincial muy delicado que en los próximos minutos voy a empezar a precisar, y no les voy a mentir, salir adelante no va a ser fácil ni inmediato, pero ya dimos un primer gran paso, tal vez el más difícil: empezamos a orientarnos en el rumbo correcto, cientos de miles de entrerrianos decidimos dejar atrás años de decadencia convencidos de que podemos volver a ser esa provincia pujante que alguna vez fuimos. Y estamos ya transitando ese camino, no sin dificultades, empezamos a ordenar una situación caótica en varios frentes: las cuentas del Estado, la administración pública, las prioridades de la gestión, la visión o la falta de visión con respecto al sector privado y la importancia de traer inversiones, y algo básico, la concepción de la política, de cuál debe ser el rol de los funcionarios públicos y de lo esencial que es tener un estado moderno, facilitador y transparente, ya que la oscuridad favorece la viveza de unos pocos”.
“Mientras nos ocupamos de desenmarañar el caos que encontramos, reordenamos las prioridades. Y empezamos a encarar las reformas estructurales pendientes, estamos presentes donde hay que estar, atendiendo a la urgencia para que nadie le falte lo indispensable”, sostuvo. Y afirmó: “Lo dije más de una vez, recibimos la provincia sin beneficio de inventario, y nos hacemos cargo. Sabíamos que no sería fácil sacar adelante una Entre Ríos postergada durante tantos años, por eso le agradezco al pueblo entrerriano la confianza que depositó en mí y en mi equipo. La mejor forma de honrar esa confianza es decirles la verdad. Durante años la credibilidad fue destruida porque la política mintió descaradamente, cada vez veíamos que estábamos más estancados, que vivíamos peor, mientras nos querían hacer creer lo contrario. Y cuando nos mienten tanto nos enojamos, pero también pasa algo peor, que es que dejamos de creer y nos cansamos de esperar. Yo no quiero un pueblo que espere, quiero un país y una provincia en la que todos juntos construyamos nuestro propio destino”.
“Sacar adelante Entre Ríos no es algo que puede hacer una persona o un grupo reducido de personas, es algo que va a lograr el esfuerzo de todo un pueblo orientado en la dirección correcta”, aseguró, y expresó: “Quiero que todos tengamos la certeza de que podemos estar mejor y que todos los días vamos a trabajar para ir en esa dirección. Acá hay un equipo que siempre les va a hablar con franqueza, aunque la verdad duela y aunque la provincia duela. Por eso hoy quiero contarles cuál es nuestro punto de partida, no voy a ser exhaustivo porque podría estar horas hablándoles del estado de situación en cada una de las áreas y porque hay una realidad: tampoco puedo darles una idea precisa y completa de lo que recibimos ya que todos los días seguimos encontrando nueva muestras del desorden que había en nuestra provincia. Sacarle el velo a tantos años de gobiernos que buscaron preservar la oscuridad no es algo que se puede hacer en un mes, ni en dos ni en tres, voy a darles un panorama general de lo que sucede en distintas áreas de la gestión y voy a contarles qué pasos estamos dando para empezar a ordenar un estado sin brújula, sin tablero de control”.
“Con esto no quiero sembrar alarma ni deslindarme de responsabilidad, quiero informarles con transparencia los problemas que debemos enfrentar porque una sociedad informada es una sociedad madura, empoderada y libre, que puede proyectar su futuro sobre bases reales para poder avanzar”, afirmó.
“Recibimos una provincia desfinanciada y endeudada, sin recursos, sin servicios de calidad y sin incentivos para producir y crecer; a esto hay que sumarle un escenario nacional muy delicado y, como dijo el presidente en varias oportunidades, sin plata, lo que impacta directamente en, por ejemplo, la tarifa de luz que es una competencia del gobierno nacional, en la política de viviendas, en la obra pública en general, en el transporte público de pasajeros y en los fondos destinados a la educación, entre otras áreas”, describió.
Situación nacional
En ese punto, se refirió a la situación nacional y los recursos para las jurisdicciones provinciales: “Desde la provincia estamos apoyando los esfuerzos que necesita el gobierno nacional para transformar un país devastado por el kirchnerismo y lograr equilibrar las cuentas públicas y bajar la inflación, y volver a crecer, que es ni más ni menos que el cambio que pidió la sociedad. No podemos seguir pateando los problemas hacia adelante, y tenemos que discutir de una vez por todas la solución a esos problemas estructurales que venimos acarreando desde hace tanto tiempo. Vivimos momentos de mucha turbulencia, los argentinos no aguantan más, viven con una enorme incertidumbre respecto al futuro y la política está en un estado de crispación y de beligerancia. Lo primero que tenemos que hacer es bajar los decibeles y entender que no puede haber una contradicción entre el objetivo del gobierno nacional para alcanzar su equilibrio fiscal, indispensable para eliminar el flagelo de la inflación, y la defensa de los intereses de las provincias”.
Y continuó: “Pasaron más de 170 años desde la Batalla de Caseros, me niego a creer que retrocedimos casi dos siglos en la pelea entre unitarios y federales. Estoy convencido de que hay puntos de encuentro entre las necesidades del gobierno nacional y la necesidad de las provincias de contar con recursos para prestar servicios de calidad y mejorar la vida de sus habitantes. Yo estoy dispuesto a hacer ese esfuerzo para encontrar esas diagonales, esos lugares de encuentro donde confluye el interés de ambas partes, que sin lugar a dudas y en definitiva es el interés común de todos los argentinos”.
“La discusión que hoy se está dando con respecto a las transferencias discrecionales del gobierno central es una discusión pendiente que tiene que ver con la asignación de responsabilidades entre los distintos niveles de gobierno. El kirchnerismo se apropió desde el inicio de su gestión de recursos automáticos de las provincias para poder manejarlas después de manera discrecional, esto contribuyó a generar aún más confusión en la ciudadanía respecto a qué nivel de gobierno es responsable de qué cosa, y es tiempo de que terminemos con eso, porque una democracia sana exige que la sociedad tenga claridad y sepa a quién reclamar por la cantidad y calidad de los bienes públicos que recibe”, observó. Y subrayó: “No tiene lógica en un país federal que el gobierno nacional gire fondos para pagar sueldos de empleados públicos provinciales, no tiene lógica que el gobierno nacional se ocupe de subsidiar en un país federal el transporte urbano de pasajeros ni que haga obra pública en los municipios; de eso tienen que ocuparse las provincias y los municipios. Pero antes de eso tenemos que reordenar cómo se distribuyen los recursos en nuestro país, qué le toca a cada nivel de gobierno”, instó.
Y completó sobre este tema: “En el último año, debido a la demagogia electoral, las provincias perdieron recursos significativos que es necesario recuperar: la Nación, en cambio, se ha quedado con los recursos que más han crecido en el último tiempo. Si esta dinámica persiste el equilibrio de la Nación va a estar acompañado, lamentablemente, de desequilibrios crecientes en las cuentas públicas provinciales y esto no es gratis para la gente, porque todos los argentinos viven, se educan, se atienden, y necesitan ser cuidados en las provincias y en los municipios en los que viven. Cada nivel de gobierno tiene que ser austero y hacer un ejercicio de introspección para ver dónde eliminar gastos que no llegan a la gente”.
Y comparó: “Sería más fácil para nosotros ordenar el descalabro que recibimos eliminando las transferencias a los municipios quedándonos con recursos que deben compartirse. En nuestra provincia hacemos el esfuerzo con nuestro gastos y con nuestros recursos y estamos dando todas las peleas que hay que dar para defender nuestros derechos sin que esto implique impulsar o apoyar medidas que signifiquen de financiar al gobierno nacional ante todo tiene que primar el sentido común algo que tantas veces faltó en la historia de nuestra provincia y de nuestro país”.
Escenario provincial
“Frente a la incertidumbre del escenario nacional y a pesar de la inflación estamos bajando el gasto público y saneando las cuentas provinciales que encontramos en rojo. Antes de asumir nos enteramos de que no había fondos para garantizar el pago de los sueldos de diciembre, aunque nos habían dicho que esa necesidad estaba cubierta. Por eso decidimos, junto a otros gobernadores, reclamar allá por el mes de diciembre al ministro de economía saliente que reintegrara los recursos que nos habían sacado de un día para el otro tras las reformas de ganancias e IVA. Conseguimos una parte menor de esos recursos perdidos, pero de todas formas nos vimos obligados a tomar deuda de corto plazo porque faltaban 40 mil millones de pesos para pagar los sueldos de diciembre en tiempo y forma”, describió sobre el panorama en la provincia al asumir.
“Abrimos un espacio de diálogo permanente con distintos dirigentes gremiales que representan a las trabajadores estatales con los que logramos hace unas semanas un acuerdo para la actualización de salarios tomando como base el salario de diciembre del 2023 y no de junio como venía haciéndose hasta ese momento y una suma fija de 25.000 pesos para afrontar los gastos de la canasta escolar”, completó, y agradeció a los referentes sindicales “por el trabajo y la buena predisposición que encontramos en todas las mesas de diálogo”. En ese punto, agregó: “Espero que juntos podamos trabajar para revalorizar la carrera administrativa porque la calidad de nuestra gestión depende de los trabajadores del Estado, y quiero que estos puedan crecer en base al mérito, a la capacitación, al trabajo, al compromiso con su tarea, y no en base al padrinazgo de un político de turno. En nuestro gobierno no va a entrar nadie a la planta permanente del Estado por ser amigo o familiar de algún funcionario”, afirmó.