Patronato eliminó a Boca por penales y es finalista de la Copa Argentina

Patronato se abraza a una noche histórica: este miércoles se clasificó finalista de la Copa Argentina y se encuentra en un momento único en sus 108 años de vida institucional y deportiva. A pesar del reciente descenso a la Primera Nacional, el equipo paranaense eliminó por penales a Boca por 3 a 2, luego de empatar 1 a 1 en el estadio San Juan Del Bicentenario, donde su principal figura fue el arquero Facundo Altamirano, quien atajó tres disparos en la definición desde los doce pasos. El próximo domingo desde las 20.30, en el estadio Malvinas Argentinas de Mendoza, Talleres de Córdoba será el rival para los dirigidos por Facundo Sava en el encuentro decisivo por el título.

El Rojinegro, que ya había eliminado a River en cuartos de final, también se dio el gusto de sacar de la carrera por la Copa al el Xeneize, que además de haberse consagrado el último fin de semana por la Liga Profesional de Fútbol también era el campeón defensor de este certamen que reúne a los equipos de las principales categorías del fútbol nacional.

Marcelo Estigarribia abrió la cuenta para los entrerrianos a los 32 minutos del primer tiempo y Sebastián Villa, de penal, empató para el Azul y Oro a los 28 del segundo. Sin embargo, en la definición por penales apareció Altamirano para tapar los remates de Oscar Romero, Alan Varela y el propio Villa y permitir el triunfo por 3 a 2, gracias también a las conquistas de Jonás Acevedo, Estigarribia y Facundo Cobos.

Fue protagonista desde el comienzo:
Patronato tomó la iniciativa y sorprendió a Boca con una propuesta audaz: liberó a Lozano al mediocampo y dejó mano a mano en la defensa a Guasone, Quintana y Kruspzky con Villa, Orsini y Briasco, por eso desde el inicio generó riesgo por la derecha. Sin embargo, a los tres minutos Villa se construyó una buena chance en velocidad, pero su disparo al segundo palo fue bien controlado por Altamirano. Los dirigidos por Sava llegaron más tarde al área contraria con sus defensores, pero Lozano en una proyección y Quintana, en una pelota parada, no le acertaron al arco.

Las jugadas de peligro, por momentos, se repartieron, pero estuvo claro que Patrón quiso jugar más cerca de García que de su arquero. A los 19, Lozano encontró un hueco para asistir a Estigarribia pero fue bien anticipado por el arquero de Boca. Un minuto más tarde, Medina probó con un remate de media distancia que pasó cerca. Cada vez que el Xeneize encontró espacios a espaldas de Lozano generó peligro y en la más clara que tuvo, Villa abrió demasiado su remate al segundo caño.

Sin embargo, a los 32, con el equipo boquense lanzado al ataque, Medina metió el pase perfecto para Estigarribia, que tras ganarle a Roncaglia definió con un tiro bajo para el 1 a 0. El Xeneize le echó el cuerpo encima al Rojinegro y por poco no llega al empate con un tiro libre de Payero que sacó Altamirano. A cinco del final, Leys por muy poco no estiró la cuenta tras una desatención desde un lateral. El primer tiempo se cerró entre la solidez defensiva paranaense y los intentos de las individualidades de Boca: el resultado no se modificó para llegar al descanso.

Mejoría de Boca, cambios de Sava
Sava cambió a dos de los defensores porque ya estaban amonestados (Guasone y Kruspzky; ingresaron Ojeda y Cobos) para iniciar el segundo tiempo. Pero Boca fue más ofensivo, soltó más a Weigandt por la derecha y generó peligro con algunos centros bien desactivados por el ingresado Ojeda y Quintana. Tuvo una chance Orsini y otra el entrerriano Roncaglia, luego de un buen centro de Langoni.

Patronato solo atinaba a resistir y salir de contra, lo dejó venir a Boca y lo pagó muy caro: Villa, en velocidad, fue derribado en el área por Leys y el árbitro no dudó en cobrar penal, a los 27 minutos. El colombiano ejecutó a la izquierda de Altamirano, que voló estérilmente hacia el otro palo: 1 a 1.

Patrón no se quedó y a la media hora tuvo el segundo con Estigarribia, tras otro quedo del chajariense Roncaglia, pero tapó García. En la siguiente, Quintana ganó en las alturas, pero le faltó precisión. Altamirano, a falta de cinco minutos, tuvo que responder ante un remate del paraguayo Romero. Y a los 43, Acevedo le sirvió un centro preciso para Giani, que cabeceó desviado. Como respuesta, Romero disparó cruzado y desviado. Todo tuvo que definirse en los penales.

Los penales, con una figura excluyente: Altamirano

El propio Romero inició la serie, pero Altamirano tapó el remate quedándose al medio; Acevedo empezó por Patronato y cruzó su remate dejando sin opción a García. El pibe Langoni, figura en la consagración en la Liga Profesional, no falló; Estigarribia abrió el pie derecho para colocar la pelota y puso el 2 a 1. Varela eligió la izquierda de Altamirano, pero lo esperó tanto el arquero que tapó el disparo del volante boquense; Giani fue el siguiente en ejecutar y García se lo atajó con una pierna arrojándose a su mano zurda. Sandez cruzó el zurdado para poner el empate y encender la ilusión de Boca, aunque Cobos puso el remate a la derecha de García, con destino hacia el otro palo: 3 a 2. El colombiano Villa, principal responsable del empate en los 90 minutos, estaba obligado a anotar para darle otra vida a Boca, pero Altamirano le atajó el penal para darle un histórico pasaporte a la final de la Copa Argentina. Talleres será el próximo escollo de Patronato, que sueña con levantar su primer título internacional y también con la clasificación a la Copa Libertadores. En una temporada atípica, Patronato sueña despierto. (análisis)

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